Del 10 al 23 de mayo de 2012
Sala de exposiciones de CC.OO. (C/ Santa Clara, 5, Santander)
EL LARGO CAMINO
Exposición de pinturas de Moulud Yeslem
Del 10 al 23 de mayo
Lunes a Viernes, de 18.30 a 21.30 h.
Sala de exposiciones de Comisiones Obreras
C/ Santa Clara, 5
Santander
INAUGURACIÓN: JUEVES, 10 DE MAYO, A LAS 20H.
Organiza: Cantabria por el Sáhara
Colabora: Comisiones Obreras de Cantabria
UN PUEBLO, DOS CORAZONES. Fernando Llorente
El pueblo saharaui se ha movido, y se mueve, en el mundo
impulsado por la energía de dos corazones, el de los “hombres de fusil” y el de
los “hombres de libro”. Dos corazones que laten al unísono en busca del lugar y
la misión que le corresponde en la historia al pueblo al que animan. Los
hombres de libro, al tiempo que enardecen la lucha en defensa de lo suyo, la
embellecen y, sobre todo, la ennoblecen. Los hombres de libro son los poetas y
los contadores de historias, de los que el pueblo saharaui cuenta con una
extensa nómina de cantores, cuya obra, en la estela de la tradición oral, está
escrita con letras de arena y viento en la estrellas, que siguen iluminando la
palabra de los ancianos en las noches del desierto, al amparo de la jaima y a
la calidez de las brasas sobre las que hierve el té.
La invasión y ocupación del Sahara Occidental, en 1975, por
las bárbaras hordas marroquíes condenaron a una parte del pueblo saharaui al
refugio en los campamentos de Tinduf. Fue a partir de entonces cuando, mientras
los hombres de fusil combatían por la recuperación de la patria arrebatada, el
corazón de los hombres de libro aprendió otros latidos que añadieran el arma de
la imagen a la de la palabra.
Así, como un instrumento en la lucha de su pueblo, considera
Mohamed Moulud Yeslem las pinturas que desde el día 10 de mayo expondrá en la
Sala del sindicato Comisiones Obreras. Mohamed Moulud Yeslem nació en la ciudad
de Ausserd (Sahara Occidental) en 1977, dos años después de la invasión. Desde
ella su familia emprendió el éxodo que la condujo a los campamentos de
refugiados. Él fue uno de los cientos de niños saharauis que, terminados sus
estudios primarios, y con el permiso de sus padres, fue enviado a Cuba, en
donde, tras concluir la Secundaria, cursó estudios de arquitectura en la
Universidad de Oriente. Después de 15 años ininterrumpidos de ausencia, regresó
a los campamentos, en donde junto a sus hermanos Fadel y Fadili, pintores
también, fundó un centro de artes plásticas, adscrito a la escuela Olof Palme, en
el campamento de El Aaiún. Los trabajos artísticos de Mohamed Moulud Yeslem no
se limitan a la pintura. En los ámbitos de la producción audiovisual también
tiene un campo de actuación, bien sea como actor, bien como realizador.
La obra pictórica que presenta en Santander ya ha visitado
otras salas de otros lugares, en cuyas paredes ha estado colgada, desde
Asturias y Alicante hasta Nueva York, pasando por Madrid, Valencia o Barcelona.
Bajo el significativo título “El largo camino” –largo en el espacio, el de ida;
el de vuelta, largo en el tiempo-, los cuadros de Mohamed Moulud Yeslem añaden
color al color de la dignidad de una existencia que humaniza un pedazo del
desierto del Sahara, el más inhóspito. Sobre el lienzo pone al descubierto el
corazón sufriente de los campamentos, con la sencillez y la ingenuidad –naïf- con
las que puede verlo un niño, como si fuera el niño que se fue muchos años antes
el que pinta a su regreso, ya adulto, la inocencia de una tierra que es de
otros, y la inocencia de un pueblo que paga las culpas de otros.
Mohamed Moulud Yeslem ya forma parte de los hombres de libro (cultura),
que sostuvieron, y sostienen, el espíritu de resistencia del pueblo saharaui. Porque
la pintura también es un arma cargada de futuro. Así lo siente Mohamed Moulud
Yeslem. Y así lo dice.